Buceando en la leyenda

Buceando en la leyenda

sábado, 29 de junio de 2013

FILIPO II DE MACEDONIA. A LA SOMBRA DE SU HIJO.

          Filipo nació el 382 a.C. en Pella, siendo el hijo más joven de Amintas III. Durante tres años (368-365 a.C.) permaneció como rehén en Tebas, donde aprendió mucho del mejor ejército griego de la época. Al morir sus hermanos mayores consiguió alcanzar el trono macedónico y, entonces, reformó el ejército, convirtiéndolo una máquina de combate que acabaría arrollando a todas las tropas contra las que luchó. Así, sus reformas militares se materializaron en la creación de una poderosa unidad de infantería o falange, armada fundamentalmente por largas lanzas de varios metros de longitud, y una fuerza de caballería pesada, que se encargaba de atacar al enemigo por las alas (el "martillo", metafóricamente hablando), mientras que los primeros resistían el empuje del enemigo por el centro (el "yunque").

        Filipo II empezó sus campañas derrotando a los ilirios comandados por Bardalis, que años antes habían vencido a su hermano Perdicas III, muriendo éste en el campo de batalla; unos 7.000 soldados illirios murieron en el combate. Después, conquistó la región de Peonia. Tras la toma de la ciudad de Anfípolis (357), obtuvo una salida al mar y la posesión de las ricas minas de oro del Monte Pangeo, que le proporcionaron abundantes recursos para sus futuras campañas militares.



Imagen de Filipo II



          Después conquistó Tracia, Tesalia.... A sus grandes dotes organizativas y de estratega militar, había que sumar sus grandes habilidades de diplomático. Además de tener un magnífico ejército, Filipo contaba con un gran tren de máquinas de asedio para rendir a las grandes ciudades amuralladas. Los éxitos del macedonio inquietaron a las grandes potencias griegas del momento y, así, Atenas y Tebas unieron sus fuerzas para intentar frenar el poderoso vecino del norte. La batalla decisiva se libraría en Queronea (338). Las fuerzas estaban muy igualadas en ambos bandos. La caballería del ala derecha macedonia estaba mandada por un hijo de Filipo llamado Alejandro: el que más tarde sería conocido como Alejandro Magno. El ejército macedonio, el que diseñó Filipo II, funcionó como un reloj, y arrolló a las fuerzas griegas aliadas, pero no las masacró porque estaban destinadas para un fin a largo plazo: la conquista del Imperio persa.



Alejandro Magno


         Tras la victoria en Queronea, se reunieron en Corinto (337), por invitación de Filipo, delegados de todos los estados griegos, excepto Esparta. Lo que allí se decidió fue la paz entre los griegos, por un lado, y la formación de la llamada Liga de Corinto, por el otro. Cada estado miembro aportaría un contingente de tropas, siendo el rey de Macedonia el hegemon ("conductor") de la Liga. Filipo envió una avanzadilla de 10.000 hombres a Asia Menor, mientras que él mandaría posteriormente el grueso del ejército griego. Pero el 336, mientras se celebraba la boda de su hija, fue apuñalado...

         Su hijo cumplió ampliamente con los planes diseñados por su padre. Todo el mundo conoce a Alejandro Magno, sin duda una de las figuras más atractivas de la Historia Universal; el joven Alejandro que conquistó un imperio con sólo 33 años. No seré yo quien le reste méritos, que de sobra los tiene. Alejandro cumplió con los planes que su padre había trazado y con un ejército que había diseñado, aprovechando una situación, de paz entre los griegos, que Filipo había propiciado. Es muy posible que Filipo II, si no hubiera sido asesinado, hubiera conquistado el Imperio Persa. Tenía un todo a su favor: una Grecia unida que le apoyaba, era un gran estratega, tenía un ejército formidable, tenía 46 años...¿Si hubiera sido de esta manera, podría haber sido conocido como Filipo el Grande?

         

         

         



miércoles, 26 de junio de 2013

¿FUE GUILLERMO TELL UN PERSONAJE REAL?

          Se dice que Guillermo Tell pasaba por la plaza de Altdorf, y que no se inclinó en señal de respeto y sumisión ante un sobrero colgado, que era el símbolo de la casa de los Hagsburgo. Dice la leyenda que este hecho fue el detonante de una serie de sucesos que acabarían por traer la independencia de los territorios que forman hoy lo que es el país llamado Suiza.


Monumento a Guillermo Tell y a su hijo en Altdorf, Suiza
 
 
 

        La leyenda dice que el gobernador Gessler le ordenó a Guillermo que se inclinara ante el sombrero, pero éste se negó. Entonces, el malvado gobernador mandó ejecutar a Tell y a su hijo, que en ese momento le acompañaba. Además, le dio la opción de conmutar la pena por una prueba cruel de puntería: debía acertar con un dardo de ballesta a una manzana colocada sobre la cabeza de su hijo. El héroe suizo, que era un consumado tirador, debía hacer su tiro a 80 pasos de distancia y no podía errar el tiro porque si no serían ejecutados él y su hijo.

          El dardo dio en el blanco sin problemas, y cuando Gessler le preguntó a Guillermo que porque había cogido dos dardos del carcaj cuando solo iba a realizar un disparo, éste le respondió que el segundo iba dirigido a su corazón en el caso de que hubiera herido a su hijo con el tiro anterior. Ante tamaña afrenta el gobernador decidió encarcelarlo, pero Guillermo Tell consiguió huir y finalmente mató a Gessler con el dardo que le tenía reservado desde un principio.  Se dice que estos acontecimientos ocurrieron en 1307.

          Lo cierto es que no hay ninguna prueba documental que pruebe la existencia de este personaje legendario ni del gobernador rival. Eso no quiere decir que ambos no existieran pero hay algunos eruditos que ven en la historia de Guillermo Tell muchas similitudes con otros relatos de la Crónica danesa Saxo Grammaticus (h.1200), y de una balada inglesa de William de Cloudeslee. Además, el nombre del protagonista se menciona por primera vez en escritos de unos 150 o 200 años después de que acontecieran los hechos descritos.

       Lo que si es cierto es que la guerra de la independencia suiza fue larga y cruel, pues no acabó hasta el 1499 con la paz de Basilea, en la que los cantones suizos se separan definitivamente del Imperio. Real o no Guillermo Tell fue un héroe necesario que sirvió de revulsivo para levantar la moral en momentos de dificultad, como otros tantos héroes en la Historia.






martes, 25 de junio de 2013

¿COMO MURIÓ VERCINGETORIX?

          En el año 46 a.C se produce un gran desfile en la ciudad de Roma. Es en honor de Julio César, el conquistador de las Galias. El general victorioso conduce un carro tirado por dos caballos, mientras que el esclavo que le acompaña sostiene una corona de oro por encima de su cabeza, y le susurra al oído constantemente que es tan mortal como cualquier hombre.



 
 
 
          A César le preceden en el desfile los senadores, músicos, carros con los trofeos ganados en la guerra, toros blancos dispuestos para el sacrificio..., y Vercingetorix, que va atado con cadenas, humillado y acabado. El antiguo jefe galo es objeto de todo tipo de burlas por parte de los habitantes de la ciudad que hacen de público.
          La comitiva del desfile, que comenzó en el Campo de Marte, entró por la Porta Triumphalis, y continuó por la Vía Sacra, pasando por el Foro Boarium, el Velabrum..., llegando hasta el pie de la escalinata del templo de Júpiter Optimus Máximus, donde el general victorioso ofrecería al dios sus laureles de victoria. A continuación se celebraba una gran fiesta costeada por el protagonista que solía ser bastante generoso, en la que participaba todo el pueblo.
          Finalmente Vercingetorix regresaría a la prisión de Tullianum donde había estado recluído durante seis años.



Foto de la cárcel de Tullianum en la actualidad
 
 
 
          La cárcel de Tullianum estaba ubicada en el foro romano. En ella ingresaban comandantes extranjeros derrotados, como Yugurta, o conspiradores, como Publio Cornelio Léntulo Sura que integró la conjura de Catilina, antes de ser ejecutados (la pena de prisión no se contemplaba en las leyes romanas). Pero solían estar menos tiempo de lo que estuvo Vercingetorix, que estuvo seis largos años recluso, desde el día en que se rindiera en Alesia ante Julio César.
           Mucho tiempo en el que pensar, en su familia en sus días de gloria, cuando unió a las tribus galas para luchar contra la arrogancia de los conquistadores romanos, cuando le hizo morder el polvo al mismo César en la batalla de Gergovia, donde murieron cientos de legionarios, sin duda, su momento de mayor esplendor. Hay una imagen de una moneda acuñada en Roma del año 48 a.C. (Vercingetorix llevaría  cuatro años encerrado por entonces) en la que se ve la imagen de un jefe galo envejecido. Hay muchos eruditos que piensan que pueda tratarse del retrato de un Vercingetorix muy desmejorado por las penalidades del cuativerio. La estremecedora imagen es la siguiente:
 
 



          Después del paseo triunfal de un César embriagado de poder y fama, Vercingetorix, el gran héroe de los galos fue estrangulado y muerto. Sólo tenía 34 años.


          Esto es una descripción de lo que pudo haber sucedido realmente, basada en otros relatos históricos, aunque no hay pruebas de que los últimos años de Vercingetorix fueran así, ya que los autores romanos que contaron el final del héroe galo vivieron al menos cien años después de que sucedieran estos acontecimientos históricos.
 
         


sábado, 22 de junio de 2013

WAMBA. EL VISIGODO QUE PERDIÓ UN REINO.

          Recesvinto, rey visigodo (653-672), murió en Gernicos (actual Wamba, provincia de Valladolid). Como era costumbre entre los visigodos, los grandes magnates del reino tenían que elegir a un soberano nuevo que sustituyera al difunto, y pensaron en Wamba que quiso renunciar al cargo porque ya tenía una edad avanzada. Finalmente fue obligado a aceptar la corona, aunque eso no significara que fuera un mal rey, sino todo lo contrario, ya que se enfrentó enérgicamente contra todos los problemas que acuciaban al reino visigodo de Toledo.



 
Estatua de Wamba en la plaza de Oriente de Madrid


          En el año 673 se produjo una rebelión en la provincia de la Galia Narbonense (en la actual Francia), por lo que envió una expedición al mando del duque Paulo. Éste cuando llegó a la zona de conflicto se cambió de bando y, los rebeldes le convirtieron en su líder. Por lo tanto, Wamba tuvo que marchar él mismo, al frente de sus tropas, para sofocar la revuelta.
          Además, llevó a cabo varias campañas militares contra los pueblos del norte de la península Ibérica, y venció en una batalla marítima a los sarracenos. En política interior, sus medidas iban encaminadas a quitarle privilegios a los nobles y al clero. Puede que esta acititud fuera la que le costara su corona...

         
          Se cuenta que en la noche del 14 de octubre del año 680 Wamba se sintió mortalmente enfermo. El obispo Julián de Toledo le hizo partícipe de la penitencia pública que recibían las personas que estaban en trance de morir. Le vistieron con ropajes monásticos, fue tonsurado (la tonsura es un corte rapado de la cabeza que se le practican a algunos sacerdotes), y se hizo sobre su cuerpo, con ceniza, la señal de la cruz. Esto se hacía, según parece, porque los religiosos accedían al Paraíso cristiano de una mejor manera. Pero no murió y Wamba despertó al día siguiente...






          Conforme a los dictados del Concilio VI de Toledo, al estar tonsurado y ser un penitente público, Wamba ya no podía ser rey. Wamba designó como su sucesor a un noble llamado Ervigio. Es evidente que todo el asunto se trató de un intriga para derrocar a un rey que "fastidiaba" a nobles y obispos, y colocar en el trono a otro monarca más agradecido a los que le habían ayudado a ascender. En crónicas posteriores (por lo tanto no muy fiables) se acusa directamente a Ervigio de suministrar un narcótico a Wamba en el día que perdió la consciencia.  Al obispo Julián no se le acusa del complot en ninguna fuente histórica, pero la celeridad con la que actuó (ungió a Ervigio con mucha rapidez, por ejemplo) le hace parecer muy sospechoso en la supuesta trama.



 
Pintura del s. XVI de san Julián de Toledo


          Wamba se retiró a un monasterio y vivió allí tranquilamente hasta que murió en el año 688. No hay que olvidar que el nunca quiso ser rey. El obispo Julián de Toledo, además de ser un gran teólogo y escritor prolífico, llegaría a ser santo de la Iglesia católica. Ervigio reinaría siete años en total, y le hizo grandes concesiones a la nobleza y al clero.


Fuente principal: Historia antigua de España de Juan José Sayas Abengochea.


miércoles, 19 de junio de 2013

¿EXISTIÓ EL PRÍNCIPE NEGRO?

          Eduardo de Woodstock (1330-1376), más conocido por su sobrenombre de Príncipe Negro, era el hijo mayor del rey inglés Eduardo III y de su esposa, Felipa de Henao. Con trece años fue proclamado Príncipe de Gales, en su calidad de heredero del trono de su padre. Cuando tenía dieciséis años fue nombrado caballero y participó en la batalla de Crécy, donde destacó por su valor luchando contra los franceses en el marco de la guerra de los Cien Años.






          Sin embargo, el Príncipe Negro realmente se ganó su buena fama de militar durante la batalla de Poitiers (1356), en la que aplastó al ejército francés capturando, además, al rey francés Juan II y a uno de sus hijos. El caballeroso trato que les dio tras la batalla fue de lo más ejemplar.







          El Príncipe Negro combatió en muchas más batallas, como en la de Nájera (1367) donde apoyó al rey de Castilla Pedro I, que luchaba contra Enrique de Trastámara, aliado de Carlos V de Francia. Además, era un habitual de los torneos medievales.



Escudo de armas del Príncipe Negro.
 
 
 
          Murió con tan sólo 45 años de edad, posiblemente de una disentería que pudo contraer cuando estuvo en Castilla combatiendo diez años antes. Al morir un año antes que su padre, nunca pudo proclamarse como rey de Inglaterra.
 
 
 


Sepulcro del Príncipe Negro.
 
 
 
         El Príncipe Negro es un personaje histórico. Lo enigmático es el porque de su sobrenombre. No hay ningún documento contemporáneo a el periodo en el que vivió donde se le nombre con ese apodo. Tuvieron que pasar 150 años para que alguien lo nombrara de esa manera en algún escrito. Por lo tanto no sabemos con certeza porque el príncipe Eduardo de Inglaterra, era el Príncipe Negro.
 
 
 
 
 
 
          Hay dos teorías al respecto:
 
-Que vestía una armadura de color negro, de lo cual no hay ninguna prueba.
-Que su actitud en la guerra era cruel e implacable, siendo esta la teoría más probable. En un raid en Francia en 1355, en Narbona, se dice que pudo haber reducido a cenizas a cerca de 500 aldeas, pueblos y ciudades sin tener un atisbo de piedad con los habitantes de las mismas.


lunes, 17 de junio de 2013

¿SIRVIÓ DE ALGO LA REBELIÓN DE ESPARTACO?

          Si hay algún nombre de héroe relacionado con la idea de la lucha por la libertad, ese es el de Espartaco. Posiblemente, fue un tracio que luchó en las legiones romanas. Más tarde, por motivos que se desconocen, Espartaco ingresó en la escuela de gladiadores de Léntulo Batiato, y en el año 73 a.C., se produjo una revuelta en dicha escuela encabezada por Espartaco, Criso y Enomao. En total, unos 70 gladiadores escaparon, consiguieron atraer a miles de esclavos y hombres libres, pertenecientes a las capas más empobrecidas de la sociedad, y vencieron en múltiples ocasiones a diversos ejércitos romanos.






          Tras vencer en distintas ocasiones a las legiones romanas, Espartaco y sus seguidores pudieron huir a través de los Alpes, pero no lo hicieron y volvieron al Sur, dando tiempo a que un buen número de legiones, que estaban combatiendo en Asia y en Hispania, regresaran a la península itálica y, estando al mando de Licinio Craso, finalmente pudieran los romanos vencer a Espartaco, que murió luchando, aunque su cádaver nunca fuera encontrado.






         Unos 6.000 seguidores de Espartaco que cayeron prisioneros, fueron crucificados a lo largo de la vía Apia. Además, Pompeyo acabó con la vida de unos cuantos miles más que intentaban huir hacia los Alpes. Se piensa que pudieron morir unos 100.000 esclavos en la revuelta que duró dos años...¿Sirvió de algo tanta sangre derramada?...







            La revuelta de Espartaco no fue la primera ni la última de estas características que se dio en Italia, pero, los esclavistas comprendieron de una vez por todas la necesidad de mejorar las condiciones de vida de sus esclavos si querían que el sistema de explotación esclavista continuase. Ya desde fines de la República comenzaron a aprobarse leyes destinadas a impedir los abusos de los dueños sobre sus esclavos: así, por ejemplo, se limitaron las arbitrariedades de algunos dueños sobre sus esclavos y se reconoció una mayor capacidad al esclavo para disponer libremente de su peculio. El sistema esclavista no entró en crisis, pero comenzó a recibir retoques humanitarios para que fuera más eficaz.




 
 

Fuente principal: Historia Universal. Edad Antigua: Roma, de Julio Mangas.

jueves, 13 de junio de 2013

LAWRENCE DE ARABIA. EL MITO Y SUS SOMBRAS.

          Thomas Edward Lawrence (Gales, 1888-1935), más conocido como Lawrence de Arabia, es uno de los grandes mitos del siglo XX. Su fama y su leyenda se derivan en gran parte de las hazañas que protagonizó en Arabia durante la I Guerra Mundial, cuando dio su apoyo a la Revuelta Árabe contra los turcos. Este episodio quedó descrito en un libro al que tituló Los siete pilares de la sabiduría. Después de la guerra, su fama se acrecentó al aparecer junto a Faisal en la firma del tratado de Versalles de 1919. Murió cuando chocó con su motocicleta en las cercanías de Clouds Hill (Inglaterra). Tenía cuarenta y seis años. Cuando la película, protagonizada por Peter O'Toole, sobre su vida se estrenó en 1962, Lawrence ya era una auténtica leyenda.


 
 

LA HISTORIA Y LA LEYENDA. T. E. Lawrence era hijo ilegítimo de Thomas Robert Tighe Chapman, un pequeño terrateniente irlandés que abandonó a su mujer y a sus cuatro hijas para marcharse con la madre de Lawrence, Sarah Junner, institutriz de las niñas. La nueva pareja tuvo cinco hijos, siendo Lawrence el segundo de cinco hermanos. Se graduó como historiador e influido por su profesor, un arqueólogo especialista en Oriente Medio, viajó hasta Siria, en junio de 1909 para trabajar en los yacimientos hititas de Karkemish. Fue allí, recorriendo un total de 1400 km a pie durante cuatro años, donde comenzó a conocer la zona, la lengua y las costumbres de sus gentes. Su principal afición en esos tiempos consistía en dibujar las edificaciones militares de origen cruzado.

            Este conocimiento de la región llamó la atención del servicio secreto, para el que Lawrence empezó a trabajar en enero de 1914. Participó en una expedición arqueológica a la península del Sinaí, que en realidad estaba destinada a obtener información sobre el ejército turco presente en la región.


 

            Al estallar la Primera Guerra Mundial (julio de 1914), Lawrence fue destinado a El Cairo, a la oficina de Inteligencia. Su trabajo consistía en cartografiar mapas y en entrevistar a potenciales agentes de inteligencia. En abril de 1916 fue enviado a Kut al-Imara (Irak), donde los turcos asediaban al ejército inglés del general Townshend, en misión secreta: sobornar al comandante de las fuerzas turcas, Khalil Pasha, con un millón de libras para que levantara el sitio y, de paso, sondear la disposición de las tribus árabes para rebelarse contra los turcos. Fracasó en ambas misiones y regresó a la oficina de El Cairo.
            
            El 5 de junio de 1916, Husayn ibn Ali, jerife de La Meca, inició la Revuelta Árabe contra los turcos otomanos, dueños de gran parte de la península arábiga. Lawrence fue enviado, como gran conocedor de la zona y del idioma, a reunirse con él. Y así en octubre de ese mismo año se reunió con los cuatro hijos de Husayn: Ali, Faisal, Abd Allah y Zayd, y concluye que es Faisal el más adecuado para dirigir la revuelta: «...es el hombre que vine a buscar en Arabia, el líder que dará gloria a la rebelión árabe...», dijo al conocerle; de ahí nacería la amistad entre Lawrence y el príncipe hachemí.    

            Acompañado por Lawrence, Faisal comenzó la ofensiva contra las tropas otomanas. Con la asesoría de Lawrence, desarrolló una estrategia que era adecuada para el terreno, la capacidad y el número de hombres de que disponía: los rebeldes libraron una guerra de guerrillas que aterrorizó a sus enemigos y fue ganándose el reconocimiento de otras tribus, que se le fueron uniendo. Esquivando siempre las fortalezas turcas, realizaron diversos ataques (marzo–abril) contra el ferrocarril del Hiyaz.




          En enero de 1917 habían tomado el puerto Wejh, pero la toma de Aqaba fue el golpe maestro que encumbró la leyenda de Lawrence. El puerto de Aqaba albergaba unas defensas costeras muy fuertes que impedían su toma mediante un desembarco, por lo que Lawrence partió de Wejh el 9 de mayo con apenas cuarenta árabes a camello y dinero para reclutar mercenarios, y recorrió casi 1000 Km del peor terreno de Arabia incluyendo una parte del desierto conocido como "el Terror". Esto fue una expedición de épicas proporciones, y en una ocasión, Lawrence regresó sólo para buscar a uno de sus sirvientes que se había caído del camello. Tras dos meses de travesía, y tras destruir a una unidad turca en batalla campal, el puerto de Aqaba cayó en manos de los árabes.

          A finales de 1917, Lawrence realizó dos incursiones de reconocimiento tras las líneas enemigas para enardecer a los árabes sirios, y en una de ellas, disfrazado de árabe, se había acercado a inspeccionar la población de Deraa. En el curso de su misión fue sorprendido por los soldados turcos, fue detenido y esa misma noche llevado ante la presencia de un mandatario turco, que pudo ser el comandante de la guarnición Bimbashi Ismail Bey o el jefe de milicias Ali Riza Bey. El resultado final fue que los soldados lo torturaron y, al parecer, fue violado. Lawrence consigió escapar y pudo continuar la lucha.
         
          En 1918 Lawrence estaba al mando de tropas árabes que vencieron a una unidad regular de soldados turcos en la batalla de Tafila, y cuando se produjo la ofensiva del general Allemby sobre Damasco, las tropas de Lawrence y Faisal que marchaban también hacia la ciudad siria, acabaron con una columna turca que acababa de arrasar la villa de Tafas, quedando muy pocos supervivientes turcos vivos tras la acción.

LAS SOMBRAS DE LA LEYENDA. La fama de Lawrence fue ganada a pulso por el mismo, por la devoción y el amor que profesó por la causa árabe a la que sirvió, y su imagen ensombrece la figura de muchos oficiales británicos y franceses que lucharon al lado de los árabes en las cálidas arenas del desierto de Arabia. Hombres de enorme valía como el teniente Garland que inventó una mina de contacto, bautizada como 'Garland mine', con la que destruía a las locomotoras de los trenes del ferrocarril de Hejaz, que llevaba tropas y suministros a la poderosa guarnición de Medina que aguantó el cerco de los aliados hasta el final de la guerra. Además, podemos mencionar a otros destacados oficiales como el coronel Newcombe, el teniente Hornby o el capitán francés Pisani, que al mando de una batería de artillería móvil tantas veces apoyó a Lawrence en sus campañas. El historiador británico David Murphy escribió que aunque Lawrence fue uno de los muchos oficiales aliados que sirvieron en Arabia, los historiadores escriben como si Lawrence sólo fuera quién representara la causa de los Aliados en Arabia.
        
           Por otro lado, David Hogarth le concede a la escritora, arqueóloga y espía Gertrude Bell gran parte del éxito de la revuelta Árabe, ya que recopiló un gran volumen de información que fue crucial para el éxito de Lawrence en Aqaba.

           La toma de Wejh se planeó con un ataque simultáneo de las tropas árabes de Faisal y Lawrence en cooperación con la Royal Navy, que atacaría desde el mar. El 23 de enero de 1917, 600 voluntarios árabes desembarcaron cerca de Wejh apoyados por el cañoneo de una flotilla inglesa. Tras la resistencia ofrecida por la guarnición otomana, la ciudad fue tomada y los defensores huyeron. Cuando Faisal y Lawrence llegaron, dos días después, ya no había turcos en la zona.

          Sobre el incidente relacionado a su detención y violación en las dependencias de una guarnición turca, algunos eruditos han encontrado inconsistencias en el relato de Lawrence, que es el único que menciona tales hechos, y hoy en día se considera poco creíble.

          Durante la ofensiva final hacia Damasco, las tropas de Lawrence y Faisal alcanzaron a una columna de 2000 soldados turcos que procedían de Mezerib, y que habían cometido incontables atrocidades contra los habitantes de Tafas. Lo que sucedió después todavía hoy es muy debatido por los historiadores, pero lo que está claro es quedaron muy pocos supervivientes turcos, alemanes y austríacos que conformaban aquella columna, para contarlo. Lawrence escribió más tarde que emitió la orden de no hacer prisioneros antes de comenzar el ataque y que los que intentaron rendirse fueron ejecutados. Después de la guerra, Lawrence escribió a su hermano que ordenó ametrallar a 250 soldados rendidos. Hoy está poco claro si ello realmente sucedió, o si fue así, que él diera tal orden.


         


lunes, 3 de junio de 2013

WILLIAM WALLACE. EL OCASO DE LOS HÉROES.



          La vida de este héroe escocés se popularizó gracias a la película titulada Braveheart, estrenada en el año 1.995. La historia real de Wallace difiere un poco respecto a lo que se dice de él en dicho film. William Wallace nació hacia el año 1.272 en una localidad de Escocia, siendo el tercer hijo de un tal Malcom Wallace, que era un terrateniente. Por lo tanto, no era un plebeyo humilde como se afirma en la película de Mel Gibson. De hecho, recibió un educación esmerada del clero, y aprendió cuatro idiomas: el francés, latín, gaélico e inglés.



  
 

 
 
              Aunque hay mucho de leyenda en torno a su figura, si parece cierto que William Heselrig, el sheriff de Clydesdale, asesinó a su esposa o compañera, Marion Braidfute, y que ese hecho pudo ser el detonante de su rebeldía ante los invasores ingleses que ocupaban Escocia en ese momento. Posteriormente, en el año 1.297, durante la batalla de Stirling Bridge, nos encontramos a William Wallace dirigiendo al ejército escocés (cosa imposible en la Edad Media si no fuera un noble), junto a otro noble, Sir Andrew Murray, que murió tras la batalla por las heridas recibidas en la misma. Fue una gran victoria para los ecoceses, tras la que Wallace fue nombrado Guardián de Escocia, o jefe de Etado de facto.
 
 
 
 
  
 
        


           Pero las mieles de la victoria duraron poco, al año siguiente el ejército escocés fue masacrado por otro ejército inglés, esta vez al mando del rey Eduardo I, y William Wallace tuvo que huir para salvar su vida. Continuó la lucha, hasta que fue capturado en 1.305, siendo juzgado y condenado por alta traición al rey de Inglaterra. La ejecución fue salvaje y bárbara, aún para la época en que le tocó vivir. William Wallace fue desnudado y arrastrado por las calles de Londres atado por los talones a un caballo.
 
 
 


 
           Lo ahorcaron, y antes de morir estrangulado lo soltaron. Después le cortaron los testículos. Le abrieron la barriga y le sacaron los intestinos, quemándolos delante de él, cuando aún estaba vivo.
 
 
 
 
  
 
 
          Por último, le cortaron la cabeza y la embadurnaron en alquitrán para preservarla, siendo colgada en una pica en el Puente de Londres a la vista de todo el que pasara por allí.
 
 
 
 
 
 
 
          Su brazo derecho lo enviaron a Newcasttle, su brazo izquierdo a Berwick, su pie derecho a Perth y su pie izquierdo a Aberdeen.
 
 
 
 
 
 
 
 
            En la película de Braveheart, no se esmeran demasiado en representar la ejecución del héroe escocés tal como fue, seguramente para que el resultado final de la película resulte ser menos duro de lo que pasó realmente. La crueldad de los hombres a sus semejantes no deja nunca de sorprender, al menos para mí.
 

 
 

 

sábado, 1 de junio de 2013

EL MAGO MERLÍN...¿EXISTIÓ O ES UNA LEYENDA?

             Todo el mundo ha oído hablar alguna vez del mago Merlín. Este es un personaje singular que aparece en un sinfín de películas, libros o publicaciones de índole infantil. En el imaginario popular es representado con un sombrero puntiagudo y haciendo diferentes trucos de magia, y está íntimamente ligado a la figura del rey Arturo. Pero, ¿existió realmente un mago Merlín en la Historia?
              Los historiadores piensan que la figura de Merlín está basada en un personaje real del siglo VI d.C. llamado Myrddin Wyllt. Éste era el bardo (o consejero) del rey Gwenddoleu, que luchó y cayó en una batalla en Britania, cerca del muro de Adriano, contra las tropas del rey Rhydderch Hael, en el año 573. Al ver la carnicería que resultó de aquel combate, Myrddin enloqueció y huyó a un bosque donde vivió como un ermitaño rodeado de animales. Se dice, que allí adquirió el don de la profecía.